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Los juristas alertan que condiciones de reclusión del político han afectado su salud física y mental.
Un grupo de abogados brasileños denunció a través de un documento que el exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas, preso en la cárcel de máxima seguridad ‘La Roca’ en Guayaquil, está sometido a un «tratamiento cruel e inhumano» y se encuentra en un precario estado de salud.
En un escrito consignado por la Asociación Brasilera de Juristas por la Democracia (ABJD), el Grupo Prerrogativas y la Red Lawfare Nunca Más, se ratificó que expertos de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) harán una visita al centro de detención donde se encuentra Glas desde abril pasado, para verificar cómo sus condiciones de prisión «afectaron gravemente su salud física y mental«.
El documento, publicado por Brasil 247, afirma que antes de la «persecución judicial» en su contra, el exvicepresidente ecuatoriano tomaba tres medicamentos, mientras que actualmente consume más de 40 y sufre varias enfermedades crónicas como espondilitis anquilosante, hipertensión arterial, gastritis, fibromialgia y severos trastornos mentales.
Según este texto, la defensa de Glas no logra obtener justicia en Ecuador «porque las decisiones favorables no son cumplidas o porque los tribunales legitimaron el secuestro».
Sobre esta denuncia, la semana pasada, la relatora especial sobre la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes de la Organización de las Naciones unidas (ONU), Alice Jill Edwards, alertó que la vida del exvicepresidente corre peligro. En abril pasado, la Policía Nacional de Ecuador irrumpió en la Embajada de México en Quito y detuvo a Glas, quien gozaba de asilo diplomático, y que es investigado por presuntos delitos de corrupción y soborno, entre otros.
