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«Cuando de Cuba se trata hay luz verde, los terroristas son protegidos por el Gobierno en vez de ser condenados», afirmó Johana Tablada.
Cuba ha denunciado la impunidad del Gobierno de EE.UU. respecto a dos ataques terroristas perpetrados contra su Embajada en Washington en los últimos cinco años. El país norteamericano se negó a identificar a la persona responsable de un asalto contra la sede diplomática cubana en 2023 y absolvió al autor de otro ataque perpetrado en 2020.
La Habana hizo su reclamo a través de un programa de televisión en el cual han participado funcionarios del Ministerio del Interior, peritos y también una alta funcionaria del Ministerio de Relaciones Exteriores que ofreció declaraciones exclusivas a RT acerca de la situación.
En particular, Johana Tablada, subdirectora general para EE.UU. de la Cancillería cubana, mencionó el caso de Alexander Alazo, quien ametralló la sede diplomática del país caribeño hace algunos años y que la Justicia estadounidense ha decidido dejar en libertad. «El informe de la psiquiatra, que es la última apelación que realiza el tribunal, dice claramente que esta persona sigue siendo una persona peligrosa«, destacó.
«Afirma incluso que su intención era matar cuando agredió la Embajada de Cuba y que es una persona que no está en condiciones de tener una vida normal, y, sin embargo, en un informe conjunto de Fiscalía con la defensa se determina que la libertad condicional es el mejor tratamiento para este terrorista», resaltó Tablada.
«Existe un patrón de impunidad»
El otro incidente ocurrió en 2023, cuando un individuo lanzó cócteles molotov contra la Embajada. Desde Cuba señalan que es imposible comprender que EE.UU. no haya brindado información a la isla, no haya presentado tampoco más evidencias, ni un interés notorio en resolver el caso. Aparte de que Washington tuvo acceso al interior de la sede diplomática, se recuerda que el edificio se ubica en uno de los lugares más vigilados de la capital estadounidense, prácticamente a unos minutos de la Casa Blanca.
«En el caso de Cuba vuelve a darse, no es la primera vez en nuestra historia ni mucho menos, vuelve a confirmarse que existe un patrón de impunidad, que cuando de Cuba se trata hay luz verde, que los terroristas son protegidos por el Gobierno en vez de ser condenados, y en estos casos, destaca la gravedad del hecho», afirmó Tablada.
La alta funcionaria explicó que EE.UU. incluso le ha impedido a Cuba poder reforzar la seguridad de su sede diplomática: no le ha permitido colocar más luces en la entrada de la Embajada, y tampoco fijar la prohibición de estacionar autos frente a ella fuera del horario de trabajo.
El doble rasero de EE.UU.
Al mismo tiempo, Tablada subrayó que el comportamiento de Washington es totalmente contrario a la proyección de Cuba con respecto a la nación norteamericana. «No se corresponde con la forma en que actúa Cuba con EE.UU., donde hemos puesto terroristas en aviones para los marshall, en horas para EE.UU., para responder a la justicia, y a criminales, personas que han cometido actos delictivos», dijo, agregando que la isla ha demostrado no ser «un refugio seguro para criminales, ni para terroristas ni para delincuentes«.
En sus declaraciones hizo hincapié en la doble moral, el doble rasero de EE.UU., país desde el que se han preparado, organizado y han partido numerosos intentos de atentados, como el que se perpetró contra Cuba. Pese a que se les suma la actitud del Gobierno estadounidense, sigue siendo Cuba el Estado que permanece en una lista de países patrocinadores del terrorismo que el mundo prácticamente en su totalidad rechaza.