La visita relámpago del presidente de EEUU, Joe Biden, a Ucrania y la nueva ayuda militar ofrecida al país buscan «revertir» los avances rusos de los últimos meses, compartió el analista argentino Marcelo Montes. El encuentro también ratifica el interés de EEUU de que Ucrania no negocie y mantenga «a los rusos ocupados».
La visita del presidente estadounidense, Joe Biden, a Ucrania es un gesto de «respaldo político, anímico y obviamente militar» a Kiev tras meses de avances rusos en el marco de la operación especial militar, asegura Marcelo Montes.
Biden arribó a la capital ucraniana el 20 de febrero para reunirse con su homólogo ucraniano, Volodímir Zelenski, y anunciar un nuevo paquete de ayuda militar que incluirá munición de artillería, sistemas antitanque y radares de vigilancia aérea por un valor de 500 millones de dólares.
Para Montes, la asistencia militar de EEUU busca «equilibrar las acciones» luego de los avances rusos registrados en noviembre y diciembre de 2022 en el sudeste de Ucrania y que, a falta de una contraofensiva de Kiev, podría consolidarse.
El analista recordó que el régimen de Kiev «pudo avanzar sobre posiciones rusas» cuando recibió ese tipo de ayuda militar, especialmente de EEUU, el Reino Unido y otros países europeos. Sin embargo, consideró que no está claro que el nuevo paquete ofrecido por Washington pueda «revertir el curso» de los acontecimientos porque Rusia «tampoco ha puesto todo lo que tiene».
En palabras del experto, si bien no hubo avances territoriales, Ucrania aún está lejos de aceptar sentarse a negociar con Rusia porque su estrategia está directamente marcada por EEUU.
«Ucrania hace lo que EEUU le dice que haga, que básicamente es mantener a los rusos ocupados en el frente militar y evitar negociar», aseveró el analista.
Por ese motivo, Marcelo Montes cree que Kiev va a intentar mantener a Rusia «detenida en el frente de batalla», aunque no podrá esperar un «desequilibrio» en la relación de fuerzas actuales con la ayuda ofrecida por EEUU. Al respecto, el experto explicó que la principal carencia de Ucrania en el frente son los aviones.
«Si algo le falta a Ucrania es cobertura aérea. Sin cobertura aérea es muy difícil revertir el resultado en el terreno porque la superioridad por parte de los rusos, sobre todo en tanques, es bastante notoria», subrayó.
Ucrania depende cada vez más de las armas y municiones que le hacen llegar desde Occidente. Según la revista The Economist, los ucranianos esperan recibir cerca de 20.000 proyectiles por día. Al haber gastado la mayoría de proyectiles de 152 mm y 122 mm de la época soviética, Kiev depende cada vez más de los países de la OTAN para equiparse. En la actualidad, EEUU puede fabricar 180.000 proyectiles de 155 mm por año y Europa produjo 300.000 el año pasado. Esto, según la revista, es apenas lo que Ucrania consume en tres meses.
Montes concluye que solo una ayuda militar con aviones podría ser clave para que Ucrania pueda ganar terreno. Sin embargo, no hay aeronaves en la lista de elementos descritos por el Gobierno estadounidense, que sí proporcionará radares de vigilancia aérea «para ayudar a proteger al pueblo ucraniano de los bombardeos aéreos».
Biden también anunció que impondrá más sanciones económicas contra empresas rusas y aseguró que «[EEUU] está aquí [en Ucrania] para quedarse» y «no nos vamos».
@Sputnik
/ Imagen principal: © AP Photo