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Su avioneta An-2 se estrelló en las gélidas y remotas tierras de la península de Kamchatka bajo unas condiciones meteorológicas extremas.
Los servicios de emergencia rusos han rescatado este domingo con vida a los tres hombres que se hallaban a bordo de la avioneta An-2 accidentada hace tres días en la península de Kamchatka, en el Lejano Oriente del país. Sus dos tripulantes y un pasajero fueron encontrados con signos de hipotermia en medio de una llanura desértica cubierta de nieve, sin nada a su alrededor.
A uno de los tripulantes le tuvieron que coser una herida en la cabeza, al sufrir un traumatismo craneoencefálico abierto, mientras que otro hombre tiene una contusión torácica, pudiendo respirar por su propia cuenta sin problemas, confirmaron a RT desde la dirección del hospital donde fueron ingresados. Actualmente, los tres se encuentran en estado estable, mientras mantienen un buen estado de ánimo y se comunican con sus familiares por teléfono.
La avioneta transportaba un cargamento y el vuelo transcurría sin problemas, en condiciones meteorológicas favorables, cuando de repente el cielo se encapotó y la aeronave se cubrió de hielo, contó a RT Andréi Mitásov, quien acompañaba el cargamento. La experimentada tripulación logró aterrizar suavemente tras el repentino congelamiento, pero al tomar tierra, una rueda de la aeronave se atascó en el fondo de la nieve y el aparato se volcó.
Para sobrevivir, los hombres se calentaban dentro de la avioneta, quemando combustible y comiendo los alimentos que tenían. «Encendimos la radiobaliza de emergencia, rezábamos y creíamos en el milagro», confesó Mitásov.
«Las oraciones y la radiobaliza de emergencia nos ayudaron«, indicó. «Hasta que no subimos al helicóptero [de los servicios de emergencia], no creíamos que nos encontrarían. Estamos celebrando nuestro segundo cumpleaños», señaló.
