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El presidente ruso reveló que algunos comandantes ucranianos, al primer intento de rendición, fusilan a sus propios militares.
El presidente ruso, Vladímir Putin, reveló este viernes al periodista Pável Zarubin cómo empezó la contraofensiva rusa en la provincia de Kursk.
«Hace unos 15 días, la 155.ª Brigada de Marines de la Flota del Pacífico rompió las defensas enemigas unos 10 kilómetros antes de nuestra frontera nacional», inició el mandatario. Entonces, empezaron a avanzar a lo largo de la frontera «de forma bastante audaz y heroica», recorriendo también unos 10 kilómetros, añadió Putin.
Luego, de acuerdo con el líder, se unieron más brigadas. «Con sus esfuerzos conjuntos, han creado un cerco bastante fiable y ahora están apretando este cerco. Han empezado a liquidar a este grupo [ucraniano]», expresó.
«Según nuestros cálculos aproximados, hay realmente unas 2.000 personas en este territorio, de 6 por 15 kilómetros», indicó el mandatario. En consonancia con el testimonio de los cautivos, el control de las tropas dentro de este enclave «se ha interrumpido y el pánico va en aumento«, señaló Putin.
Algunos comandantes, al primer intento de rendición, fusilan a sus propios militares, denunció el presidente ruso. «Tratan de ocultar al Ejército que están rodeados, pero eso no afecta a la situación», dijo. Mientras, los esfuerzos por desbloquear las zonas cercadas son «infructuosos», los combatientes rusos repelen con seguridad todos los intentos de contraataque. «En cualquier caso, hasta la fecha, el enemigo no ha podido hacer nada», aseveró Putin.
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