El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, confirmó que su país intervino para respaldar al gobierno de Javier Milei y permitir que el presidente llegue a las elecciones legislativas de octubre. “Mientras el presidente continúe con políticas económicas fuertes, estaremos para ayudarlo a llegar hasta las elecciones”, afirmó Bessent, dejando en claro que la asistencia está condicionada a reformas estructurales y políticas económicas sólidas.
El titular del Tesoro agregó que la preocupación de los mercados no refleja desconfianza en el gobierno actual, sino décadas de mala administración: “El mercado está mirando por el espejo retrovisor, observando décadas de terrible mala gestión, y la gente está preocupada, inquieta. Es difícil creer que esta vez va a ser diferente. Creo que con el presidente lo será”.
El anuncio llega tras semanas negras para el gobierno: la derrota electoral en la provincia de Buenos Aires, el dólar en alza, el Riesgo País por encima de los 1.000 puntos y las acciones locales en caída reflejaron la desconfianza del mercado. Con reservas limitadas y un plan económico que ya se había agotado, Milei y Caputo debieron recurrir a Estados Unidos para conseguir un salvataje que les permita sostenerse hasta los comicios.
Milei y Caputo, total desconcierto
En un gesto que combinó oportunismo y desconcierto, Milei y su ministro de Economía, Luis Caputo, repostearon el mensaje de Bessent.
Las citas del presidente y de «Toto» muestran que, o no entendieron el mensaje en inglés, o no les importó que Bessent dejara claro que, sin el apoyo de Estados Unidos, el gobierno no habría llegado a las elecciones legislativas.
Entre divisas y recortes
La ayuda financiera de Donald Trump llegó mientras el gobierno de Milei aplicaba medidas internas para intentar mejorar la liquidez y frenar la presión sobre el dólar y los mercados.
Por apenas tres días, se redujeron a cero las retenciones al agro, beneficiando principalmente a las grandes cerealeras. Además, se eliminaron retenciones sobre la carne y se abrió el mercado de exportaciones de servicios, sin comisiones ni topes para ingresar dólares.
Un respiro, no la solución
Bessent destacó que Argentina es un “aliado sistémicamente importante” en América Latina y que el Tesoro actuará dentro de su mandato para apoyar al país. La combinación de respaldo externo y medidas internas muestra a un gobierno acorralado, que busca sostenerse financieramente y políticamente mientras los sectores más vulnerables miran cómo se reparten los costos de la crisis.
El salvataje le dio al gobierno un respiro (momentáneo), pero la economía sigue bajo presión. La verdadera prueba llegará en las próximas semanas, cuando se mida si este puente financiero alcanza para estabilizar los mercados y sostener la gobernabilidad antes de las elecciones legislativas de octubre.