Bitcoin (BTC) atraviesa un nuevo ciclo alcista, pero esta vez con un comportamiento atípico respecto de ciclos anteriores. Según el último informe de la firma CryptoQuant, grandes jugadores del mercado —entre ellos empresas cripto, fondos institucionales y gestores de ETF— estarían actuando de manera estratégica para evitar un sobrecalentamiento del precio, con el objetivo de extender la duración del ciclo y maximizar el potencial de crecimiento.
El analista identificado como Crypto Dan advierte que estos movimientos podrían estar diseñados para conducir a una etapa eufórica más adelante, con proyecciones que estiman un precio de u$s200.000 o más por unidad antes de que finalice el ciclo actual.
¿Qué diferencia a este ciclo de los anteriores?
El comportamiento de bitcoin en 2024-2025 difiere de los picos históricos anteriores. En 2017, por ejemplo, la criptomoneda mostró una suba agresiva interrumpida por correcciones cortas. En 2021, en cambio, el mercado sufrió una corrección prolongada a raíz del contexto macroeconómico por la pandemia.
Este año, bitcoin ha atravesado retrocesos más marcados pero controlados, especialmente en los períodos de marzo a noviembre de 2024 y entre enero y abril de 2025. Durante esas fases, las altcoins también mostraron un bajo rendimiento, lo que afectó el sentimiento general del mercado. Sin embargo, las caídas no fueron tan pronunciadas como en otras épocas, lo que indica una posible “gestión del mercado” por parte de actores relevantes.
Un dato clave que respalda esta hipótesis es el análisis de las bandas de edad de los UTXO (unidades de bitcoin no gastadas). Según CryptoQuant, se observa una reducción en la participación de monedas antiguas —propias de los «holders» de largo plazo— y un aumento de las más jóvenes, lo que sugiere una distribución progresiva de BTC desde inversores experimentados hacia nuevos participantes.
Grandes jugadores institucionales toman el control
La presencia institucional en el ecosistema bitcoin no deja de crecer. Empresas como Twenty One Capital, que recientemente recaudó u$s100 millones mediante bonos convertibles, están acumulando BTC de forma agresiva. Con u$s685 millones en tenencias, se ubica como la tercera firma que más bitcoin posee entre las compañías que cotizan en bolsa.
Esta estrategia también es seguida por firmas como Strategy y MARA Holdings, que utilizan distintas herramientas financieras para aumentar su exposición al activo sin provocar movimientos de precios bruscos. En paralelo, los ETF de bitcoin al contado han democratizado el acceso institucional, al permitir que bancos y fondos tradicionales inviertan sin necesidad de custodiar directamente los criptoactivos.
Según Crypto Dan, todas estas acciones responden a un mismo objetivo: prolongar la tendencia alcista del BTC evitando picos explosivos en el corto plazo, una estrategia que busca mantener la confianza del mercado y permitir una mayor acumulación institucional antes de la fase final.
Predicciones de precio: ¿cuánto podría valer el bitcoin?
Las proyecciones de precio para bitcoin son cada vez más optimistas. Manuel Beaudroit, CEO del exchange argentino Belo, estimó un rango de entre u$s 180.000 y u$s 200.000 como techo para esta fase del ciclo.
En tanto, el banco Standard Chartered va aún más allá. Su informe anticipa un sendero de crecimiento sostenido:
Estas predicciones apuntan a una etapa de euforia futura, pero no inmediata, sino diferida y con mayor planificación, muy distinta a la dinámica explosiva de ciclos anteriores.
¿Qué puede esperar el inversor argentino?
Para quienes siguen de cerca el precio de bitcoin desde Argentina, este contexto ofrece señales mixtas pero alentadoras. Por un lado, la posibilidad de un crecimiento sostenido y menos volátil puede dar más margen de entrada a quienes todavía no participan del mercado. Por otro, la entrada de capital institucional y la profesionalización del ecosistema cripto podrían generar mayor estabilidad en el largo plazo.
Además, si las predicciones se cumplen, el BTC podría transformarse no solo en un refugio ante la inflación global, sino también en una oportunidad de inversión de alto rendimiento, incluso en un contexto local de restricciones cambiarias y crisis económica.
