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Las pérdidas fiscales por la acción delictiva de Frank Richard Ahlgren III se calculan en más de un millón de dólares. Además, deberá indemnizar al Estado.
Un estadounidense de Austin (Texas) fue condenado a dos años de prisión por presentar fraudulentas declaraciones de impuestos respecto a las sustanciales ganancias que obtuvo con la venta de bitcoines. Se trata del primer caso penal de evasión fiscal totalmente relacionado con criptomonedas, informó este jueves la Oficina de Asuntos Públicos del Departamento de Justicia de EE.UU.
Según las autoridades, Frank Richard Ahlgren III, uno de los primeros inversores en bitcoines, compró en 2011 aproximadamente 1.366 unidades del criptoactivo por un valor de 495 dólares. En 2017, vendió 640 en 3,7 millones de dólares y utilizó gran parte de las ganancias para comprar una casa.
Ese mismo año, cuando llegó el momento de hacer su declaración de impuestos sobre la renta, Ahlgren presentó un «resumen falso de sus ganancias y pérdidas por la venta de bitcoines». Para ocultar la cifra real de beneficios económicos, afirmó haber comprado las divisas a precios «mucho más altos de los que realmente pagó», sostuvo el Departamento de Justicia.
Según la acusación, en 2018 y 2019 el implicado continuó haciendo negocios y vendió más de 650.000 dólares en bitcoines, de cuyos dividendos tampoco informó al servicio de impuestos. Además, durante esos años intentó ocultar sus transacciones mediante «medidas sofisticadas», como el uso de múltiples billeteras, intercambios por dinero en efectivo y aplicaciones para enmascarar el origen y el destino de las monedas.
Una tentación no aconsejable
Las pérdidas fiscales por las prácticas delictivas de Ahlgren se calculan en más de un millón de dólares. De acuerdo con Stuart Goldberg, de la División de Impuestos del Departamento de Justicia, el acusado sabía que debía pagar impuestos, pero optó por mentir y tratar de ocultar sus ganancias con el uso de técnicas sofisticadas. «Cumplirá condena porque creyó que sus transacciones en criptomonedas eran imposibles de rastrear. Este caso demuestra que nadie está por encima de la ley», dijo.
«Este caso marca el primer procesamiento por evasión fiscal penal centrado únicamente en criptomonedas. Como los precios de las criptomonedas son altos, también lo es la tentación de no pagar impuestos sobre su venta. Evite la tentación y evite la prisión federal», comentó al respecto Lucy Tan, del Servicio de Impuestos Internos de EE.UU.
Además de la pena de dos años de prisión, Algren tendrá que pagar alrededor de 1,1 millones de dólares como «restitución» al fisco de Estados Unidos.