Luego del reciente colapso de apalancamiento por la amenaza arancelaria de Trump a China, las criptomonedas amagaron con un rebote. Sin embargo, este miércoles volvió a entrar en escena la tendencia bajista del mercado.
La cautela marca la tónica en el mercado de criptomonedas, al igual que la jornada previa y Bitcoin (BTC) vuelve a caer, para quedar muy cerca de perforar los u$s110.000 este miércoles. Por su parte, Ethereum (ETH) registra una merma del 3,7% en las últimas 24 horas y vuelve a operar debajo de los u$s4.000.
En el segmento de altcoins, predominan también las bajas. Solana (SOL) cede más de 4%, al igual que Cardano (ADA), y Dogecoin (DOGE), según Binance.
El fantasma de los aranceles
El mercado aún procesa el impacto del reciente colapso de apalancamiento —el mayor de la historia del ecosistema cripto— desatado tras la amenaza arancelaria de Donald Trump contra China. Ayer, el representante comercial de Estados Unidos, Jamieson Greer, advirtió que la suba de tarifas del 100% al gigante asiático «depende» de los movimientos de Beijing, aunque Trump intentara distender el clima.
No obstante, los analistas sostienen que el mercado mantiene fundamentos sólidos y proyecciones alentadoras. Firmas especializadas como Glassnode y CryptoQuant aseguran que, pese a las fuertes bajas registradas, la liquidez y la demanda estructural se mantuvieron firmes.
Si bien el impulso de corto plazo se moderó, los grandes tenedores de criptoactivos aprovecharon la corrección de precios para incrementar posiciones, mientras el suministro de stablecoins continúa en expansión.
Powell alienta al mercado
En este marco, los operadores destacan que la comparecencia de ayer del presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, aportó el respaldo que el mercado necesitaba.
En su última intervención pública, Powell ratificó que la política monetaria seguirá orientándose por los datos, pero también señaló que el banco central se aproxima al final de su ciclo de «ajuste cuantitativo», el proceso de reducción de tenencias de bonos iniciado en 2022.
El mercado interpretó estas declaraciones como un giro «dovish», equiparable a una baja de tasas encubierta. La lógica es clara: reducir el balance de la Fed implica menor liquidez en el sistema, lo que endurece las condiciones financieras de manera similar a una suba de tasas. Por eso, las palabras de Powell generaron un impacto positivo en la plaza cripto.