Desde la bancada de Unión por la Patria consideraron que el diputado libertario ejerce «un uso abusivo y discrecional de sus atribuciones».
La estrategia oficialista de paralizar las actividades de la Cámara de Diputados tuvo una nueva repercusión este martes, cuando desde el bloque peronista pidieron remover a José Luis Espert de la presidencia de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, acusándolo de no convocar a tratar las agendas alternativas a las libertarias.
Desde el inicio del año legislativo, la oposición sólo consiguió tratar proyectos en la comisión presidida por Espert a partir de emplazamientos, es decir que una votación en el pleno de la sesión obligó a realizar la convocatoria. Algunos de los temas emplazados fueron emergencia por discapacidad, aumento de jubilaciones, financiamiento universitario y emergencia para la salud pediátrica.
Los cruces entre Espert y el peronismo se tensionaron en las últimas semanas, luego de que el diputado libertario diera una conferencia en la Universidad Católica, en donde se refirió a Florencia Kirchner, hija de los exmandatarios: «¿Cómo no vas estar amargada si sos hija de una gran puta?».
A ello le siguió un escrache de militantes del peronismo al propio diputado nacional, que consistió arrojar excremento y papel higiénico sucio frente a su casa, además de colgar un pasacalles. Por ese motivo, cinco personas fueron detenidas, incluso una concejala de Quilmes, Eva Mieri. Hasta el momento, todos los sospechosos fueron liberados mientras continúa la investigación, con excepción de Mieri.
Remoción de José Luis Espert
En el documento rubricado por la diputada Victoria Tolosa Paz (Unión por la Patria) se remarca la importancia de la Comisión de Presupuesto y Hacienda argumentando que «sin su funcionamiento, se obstruye la posibilidad de dar tratamiento a leyes clave, comprometiendo el ejercicio pleno de las atribuciones constitucionales del Congreso de la Nación».
En ese sentido, se considera que «José Luis Espert se ha abstenido de convocar reuniones ordinarias o extraordinarias, privando a esta Honorable Cámara del ámbito natural para el tratamiento, análisis y dictamen de los proyectos de ley que le han sido legítimamente girados».
«La negativa del presidente de dicha comisión a habilitar su funcionamiento y a convocar instancias de trabajo para el tratamiento de los expedientes girados constituye un uso abusivo y discrecional de sus atribuciones, en abierta contradicción con los principios de pluralismo, deliberación pública, transparencia y responsabilidad institucional que deben orientar el accionar parlamentario en un régimen democrático», se plantea.
Para finalizar, el pedido de remoción sostiene que «este Parlamento no puede seguir funcionando sin reactivar el corazón del proceso legislativo en materia presupuestaria, ni puede tolerar que las decisiones estratégicas sean invisibilizadas por la pasividad de quien tiene la responsabilidad de conducirlas».