Después del editorial del Financial Times, donde advierten sobre los riesgos económicos del salvataje de Donald Trump a Javier Milei, otro diario internacional puso la mirada sobre el Gobierno argentino y las elecciones legislativas de este domingo. El New York Times publicó una crónica del acto de campaña del ultraderechista en Córdoba, donde pidió el voto mientras recorría una calle comercial con negocios vacíos o cerrados producto de la crisis económica generada por sus recortes.
“Milei les está pidiendo paciencia a los votantes, prometiendo que su proyecto económico terminará dando sus frutos, sobre todo ahora que Estados Unidos ha ofrecido ayuda”, dice el periódico neoyorkino y menciona que la administración de Trump se ha comprometido a hacer un swap de divisas con Argentina por 20.000 millones de dólares y que inversionistas privados -según el secretario del Tesoro, Scott Bessent- evalúan la posibilidad de prestar otros 20.000 millones.
“Pero después de conseguir un paquete tan generoso del país más rico del mundo, ganarse la paciencia de sus votantes parece un obstáculo aún mayor para Milei”, añade el diario.
La crónica, además, recopila las voces de distintos actores que estaban en el acto o en la zona, en una provincia que fue fundamental para el triunfo de Milei en las elecciones de 2023.
Entre los testimonios está el de Mario Gómez, un hombre de 43 años que había votado a Milei, pero que luego fue despedido de una planta química en Río Tercero. “Lo votamos a él, y hoy yo estoy acá afuera, sin trabajo, encima sin plata”, dijo al New York Times.
Según contaron Gómez y otros trabajadores que estaban cerca de la recorrida del Presidente, el ultraderechista no cumplió su promesa de “terminar con la casta” y “en cambio, a la clase trabajadora la detonó”.
Sin embargo, otro de los extrabajadores de la planta química que también había votado a Milei, Darío Maldonado, le dijo al medio que es consciente de que “un cambio generacional no lo vas logrando en un año” y que hay que esperar.
Jubilados y clase media, los más golpeados
El New York Times afirmó que “los expertos afirman que la clase media ha sido la más afectada por su programa de austeridad, con fuertes aumentos en las facturas de servicios públicos, las matrículas escolares y los costos de la salud, lo que ha obligado a muchos hogares a reducir sus gastos”.
En Villa María, apunta el medio, “la mayoría de los jubilados de la ciudad reciben el equivalente a unos 250 dólares al mes, lo que se sitúa en torno al umbral nacional de pobreza”. De acuerdo a los testimonios que pudieron recopilar cerca de un centro comunitario, “la vida nunca les ha sido fácil, pero afirman que Milei ha empeorado las cosas al no aumentar las pensiones cuando los precios de los medicamentos y otros productos se disparaban”.
Graciela Ñañez, de 64 años, dijo al periódico que votó por Milei en 2023, pero que ahora le cuesta mucho comprar comida o alquilar ropa para los actos escolares de sus nietos.
“No entiendo mucho de política, pero yo veía, veo la miseria en Argentina que los pobres cada vez más pobres, que los ricos, cada vez más ricos, y yo pensaba que era un problema del otro gobierno”, afirmó la mujer.
Otro jubilado, José Rubén Torres, de 72 años, dijo que ya no puede ni siquiera comprar entradas para ir a ver a Alumni. Hoy se queda en la vereda afuera del estadio y trata de ver los partidos desde atrás de una valla.
En el centro de Córdoba, a pasos de donde estaba Milei, el New York Times habló con el dueño de una tienda de ropa, Pablo Heredia, que contó que había tenido que cerrar una sucursal y que probablemente cerraría otra debido a la caída de las ventas. “Estábamos acostumbrados a salir a cenar, ir de vacaciones, ahora llegué a un punto que no tengo un mango directamente”, dijo.
En otra tienda, una de las empleadas aseguró que seguía apoyando a Milei: “Está muy difícil la cosa, pero creo y espero que las cosas van a mejorar a futuro”
Los que todavía bancan
El periódico neoyorkino habló también con Rafael Cueto, un sojero de 53 años que no quiere “volver a lo anterior”, en referencia a los gobiernos kirchneristas.
“Las tierras de cultivo alrededor de la ciudad estaban salpicadas de tubos de plástico de 60 metros de largo donde muchos agricultores almacenaban sus cosechas, pues consideraban que sus cultivos eran un depósito financiero más seguro que guardar pesos, la moneda local, en cuentas bancarias”, describe el medio.
Otra seguidora de Milei, Moira Minue, destacó que gracias a las medidas del Gobierno puede comprar juguetes en Amazon.
Para otros votantes de La Libertad Avanza, no es mala idea entregarle la soberanía argentina a Estados Unidos.
“‘Queremos ser un país capitalista y de derecha’, dijo Rosa Ortelli, una profesora que trabaja con personas ciegas, en el mitin del martes de Milei. ‘Y si Estados Unidos quiere comprarnos, estupendo’”, cierra el artículo.
