«Éste es el camino, no voy a hablar por los demás, se confirmará con el tiempo». En su raíd mediático luego pegar el salto del PRO a La Libertad Avanza, el intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela, anticipó lo que se viene en las próximas semanas: una fuga de dirigentes del partido que lidera Mauricio Macri y que, ya desde diciembre de 2023, parece entonar el clásico tema de Serú Girán: desarma y sangra. Desde el sector que responde al expresidente evitaron por ahora pronunciarse públicamente del tema, aunque por lo bajo trataron de restarle importancia.
Tras sacudir el armado político de la derecha, Valenzuela eligió algunos medios de comunicación afines para defender su decisión. Rechazó las acusaciones que circularon en las redes sociales tildándolo de «traidor» y le contestó a quiénes le dijeron que actuó por un interés personal. «No necesito nada, me chicaneaban con que buscaba un cargo… qué cargo si tengo el cargo más lindo, salvo ser Presidente, es estar en la intendencia con uno de los distritos», aseguró.
La pelea por la candidatura a la gobernación
Más allá de las declaraciones de rigor para evitar un enfrentamiento interno anticipado, Valenzuela dejó en claro que quiere disputar un lugar en la carrera hacia la gobernación. «Yo me anoto para ser parte del equipo para recuperar la provincia en 2027», deslizó. Hace tiempo que el intendente bonaerense viene amagando con salir del municipio para enfrentar «la madre de todas las batallas». “Hoy estoy feliz siendo intendente y quiero aportar esa experiencia. Después se definirá el tema de las candidaturas cuando sea oportuno”, se excusó. Valenzuela sabe que tendrá que dirmir la postulación con el titular de la comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados, José Luis Espert, quien se mueve entre las filas libertarias con la intención de ser el sucesor de Axel Kicillof. Sin embargo, Espert no cuenta con el aval de Santiago Caputo ni Karina Milei por lo que corre de atrás en esa contienda. En cambio, el intendente de Tres de Febrero publicitó su pase de la mano del subsecretario de integración sociourbana, Sebastián Pareja, titular de LLA en la provincia y hombre cercano a la hermana del Presidente. «El Jefe» como la llama Milei, es la dueña de la lapicera a la hora de definir la candidaturas en todo el país.
Otro que se suma a esa lista de aspirantes es Diego Santilli. El «Colo» es uno más de los dirigentes del PRO que hace rato viene coqueteando con pasarse al equipo violeta. Después de haber perdido la elección provincial en 2015, Santilli sabe que la escudería macrista no tiene chances de ganar si no es en el marco de una alianza con el espacio que lidera el Presidente. “Vamos a poder trabajar más intensamente para ganar la PBA. Hay muchos municipios que se perdieron por la división (entre la LLA y el PRO), incluso la provincia misma. Las figuras más importantes tienen que encontrarle la vuelta a sumar y no dividir, ni colaborar con el kirchnerismo”, señaló Valenzuela, acompañando la postura de Milei de hacer un acuerdo en todo el país.
Para justificar esa estrategia acuerdista, el intendente puso de ejemplo los resultados que logró en su distrito cuando ganó en 2023 con el 47 por ciento de los votos: «Soy el único que queda de la camada inicial de 2015 de Mauricio Macri en el conurbano. Pregúntele a los demás por qué perdieron. Fui ganando elecciones con las banderas del PRO, entendiendo a un pueblo trabajador, Pyme, y pudimos transformar», desafió y agregó: «que me hayan votado sectores por fuera de Juntos por el Cambio es un orgullo sino hubiera perdido». Según sus cuentas, recibió 8 puntos de votantes de Sergio Massa y otros 8 de Milei.
El goteo macrista
Más allá de evitar una confrontación directa con Macri, el momento que Valenzuela y los libertarios eligieron para anunciar su pase fue como una puñalada para el exmandatario, que viene perdiendo por goteo a varios de sus integrantes. A fines de diciembre el exsecretario de Seguridad porteño, Diego Kravetz, abandonó el barco del PRO y se sumó a LLA. Quedó como número 2 de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE), organismo que maneja el poderoso asesor Santiago Caputo.
Además, la semana pasada el senador Luis Juez anunció su renuncia a la presidencia del bloque de senadores del PRO por diferencias con su conducción. El cordobés adelantó que le encantaría ser candidato a gobernador de Milei en su provincia.
«No puedo hablar por los demás, pero el equipo de Bullrich sigue este camino. No voy a dar nombres, pero he conocido una cantidad enorme de gente que ha sido importante en la campaña de Horacio Rodríguez Larreta, o que se define macrista públicamente que me escribió», reveló Valenzuela, jugando al misterio. De los 37 diputados nacionales que integran el bloque, hay unos 12 que responden a Bullrich y que estarían dispuestos a sumarse a las autodenominadas «fuerzas del cielo». En esa nómina se anotan Damián Arabia, Sabrina Ajmechet, Silvana Giudici y Laura Rodríguez Machado, entre otros.
La ministra de Seguridad se ocupa cada vez que puede de desgastar a Macri, quien la desplazó de la presidencia del PRO por cortarse sola y negociar un lugar en el gobierno libertario para ella y su compañero de fórmula Luis Petri, actual ministro de Defensa. Desde la gestión, Bullrich pretende convertirse en la líder de los exmacristas. Ya hizo su aporte en la provincia de Buenos Aires. Junto a Valenzuela son los responsables de fracturar la bancada de legisladores del PRO. En un primer momento formaron un bloque propio y luego se fusionaron con los libertarios.
En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires también se espera una estampida amarilla pronto. Los legisladores que le responden a Bullrich, con Juan Pablo Arenaza a la cabeza, esperan la señal de la ministra para cruzar el charco.
El presupuesto y las extraordinarias
El reclamo de la mesa ejecutiva del PRO por la exclusión de la ley de Presupuesto 2025 del temario de las sesiones extraordinarias, terminó de perjudicar el liderazgo de Macri. En un comunicado, señalaron que la decisión de Milei «aleja de la democracia participativa y refuerza una visión autoritaria, donde no hay espacio para el debate ni la construcción conjunta». rápidamente varios dirigentes del PRO, incluidos algunos que integran esa mesa, salieron a desmarcarse. Tras la reacción, ni siquiera el propio Macri se hizo cargo de aquel texto. Las miradas cayeron sobre el jefe de Gobierno porteño Jorge Macri y el exsecretario general de la Presidencia, Fernando De Andreis.
Ya con la camiseta libertaria puesta, Valenzuela acompañó los cuestionamientos a ese comunicado. «No podemos ponernos en frente de Milei, ser oposición, podemos ser un oficialismo con matices, pero el lugar en el que se pone el PRO reclamando el presupuesto… Todos queremos tener presupuesto, pero uno malo nos hace retroceder. No es el lugar productivo del PRO decir que quiere un presupuesto productivo a toda costa, pero ‘dame las obras, más gastos’, nuestro lugar es colaborar para que este proceso se consolide y no comprometerlo», completó Valenzuela.
Este lunes comienza formalmente el período de extraordinarias, que se extenderá hasta el 21 de febrero. El gobierno ratificó que el Presupuesto no estará en el temario. Las votaciones serán otra prueba más para el PRO, que tendrá que decidir si expone nuevamente sus diferencias internas y la sangre llega al río. Otra vez.