El funcionario expresó estos conceptos en el marco del 16 Congreso Córdoba del Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas (IAEF), al defender el proyecto de ley que envió al Congreso para reformar, entre otras, la Ley Penal Tributaria.
La iniciativa eleva el monto de la figura de evasión agravada de $1 millón a $1.000 millones. “Presentamos el proyecto de ley que necesita mucha substancia y por eso pedimos apoyo de los gobernadores. Ya tenemos apoyo de 17”, explicó el titular de ARCA.
Pazo dijo que la intención es que la gente entienda que el fisco “no los va a perseguir de manera eterna”. “Uno de los elementos es la suba de los umbrales, para llevar la evasión agravada a partir de $1.000 millones. Eso permitiría reducir de 7.000 causas que están en los tribunales a 200. Para tener una idea, en Estados Unidos hay 2.000 causas”, planteó el funcionario.
“Más allá de las resoluciones y la presentación del proyecto de ley, lo más importante es el cambio de mirada. Ahora se piensa que del otro lado del fisco no hay 47 millones de narcotraficante, sino que hay 47 millones de ciudadanos”, afirmó el titular de ARCA.
Pazo indicó que el Gobierno no puede ser más agresivo con la baja de impuestos, debido a las restricciones presupuestarias. “En este momento atacamos lo que podemos atacar. Desde ARCA estamos dando los incentivos correctos para que la gente vuelva al sistema. Este es el único camino que tiene el país para salir adelante”, dijo.
El titular del organismo recaudador sostuvo que hubo una “sobre regulación” impositiva que “tuvo un efecto pésimo”. “Tenemos entre 5 y 10 bases monetarias fueras del sistema y 50% de evasión. Las consecuencias del régimen pasado fueron tremendas, la informalidad desde 2019 a la fecha creció exponencialmente”, explicó.
La opinión de los privados
El tributarista César Litvin señaló que “la relación del fisco con el contribuyente ha sido una relación de poder en los últimos años”.
“Hubo panoptismo fiscal, el fisco tenía todos los datos de intimidad económica de un contribuyente. ARCA tenía más datos que los organismos de inteligencia”, indicó Litvin.
En cuanto al Régimen Simplificado de Ganancias, que establece una especie de barrera para que ARCA no pueda revisar los datos de una persona a más de un año hacia atrás, el tributarista indicó que es una suerte de “blanqueo si costo”. “Tiene el efecto de un tapón fiscal, es hacer tabula rasa y a partir de ese momento, portáte bien”, explicó el profesional.
El proyecto de Ley presentado por el Poder Ejecutivo tiene trámite parlamentario y contaría ya con el apoyo de unos 17 gobernadores. Para que el tapón fiscal del régimen de Ganancias Simplificado pueda aplicarse es necesario que lo apruebe el Congreso.