El diputado nacional por el Pro Gerardo Milman, acusado de ser el autor intelectual del intento de magnicidio el 1º de septiembre de 2022 a la ex vicepresidenta Cristina Kirchner, volvió a defender su inocencia este miércoles en una entrevista radial y explicó, de un modo insólito, por qué borró los mensajes incriminadores de su celular y también por qué le entregó a la justicia un teléfono distinto al que tenía cuando ocurrió el crimen.
Mientras hoy se retoman las audiencias en el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N°6, en el marco del juicio contra Fernando Sabag Montiel y los otros acusados por el atentado, el legislador reconoció haber borrado los mensajes de su celular antes de entregarle el teléfono a la Justicia, y espetó: «¿Nadie en Argentina elimina mensajes? Es una opción que el teléfono nos da a los ciudadanos. Si es delito, hagamos algo para que esa opción en todos nuestros teléfonos no exista más«. Ante las risas por el absurdo, y las repreguntas de los conductores radiales, enseguida, insistió: «Yo no estaba involucrado, si a mí nadie me citó a declarar».
Por otro lado, los periodistas le preguntaron por Ivana Bohdziewicz, una de las secretarias de Milman que estaban en el bar-restaurante Casablanca cuando un testigo escuchó decir al legislador la frase «cuando la maten yo estoy camino a la costa». Indicaron que la mujer había declarado ante la Justicia que le había llegado la orden de borrar todos los mensajes de su celular hasta la fecha del crimen. Sin embargo, el funcionario del Pro lo negó.
«También hizo otra declaración, donde dijo que la frase que se me adjudica no se dijo, y que tampoco hablamos de Cristina Kirchner. O le creemos las dos cosas o no le creemos nada«, contraatacó.
Por último, Milman fue consultado por el teléfono que entregó a la Justicia, un Iphone 14, cuyo modelo salió a la venta un año después del ataque. «Fui a Madrid y cambié el teléfono, si soy inocente ¿por qué no lo puedo hacer?«, justificó.
Milman se encuentra en el radar mediático de la última semana por la demanda que presentó en su contra la diputada nacional por Santa Fe de Unión por la Patria Florencia Carignano luego del cruce de declaraciones que mantuvieron en la sesión de la Cámara de Diputados.
La legisladora presentó una demanda penal contra Milman por amenazas y solicitó que se adopten medidas preventivas para garantizar su integridad y el libre ejercicio de sus funciones como legisladora. El pedido fue no solo por los cruces de la sesión, sino por frases posteriores de Milman en medios de comunicación y redes sociales.
«Si le pasa algo a la diputada Carignano tengo otro problema porque me van a acusar de ser el autor de la amenaza. Ojalá no le pase nada, por Dios. Pero algo tengo que hacer, no puedo dejar las cosas así», sostuvo Milman, quien también anticipó que se presentará ante el Poder Judicial para reparar su reputación y «buen nombre».