Los futuros de soja para enero en la Bolsa de Comercio de Chicago bajaron un 0,8%, a u$s363,95, después de caer al precio más bajo para el contrato desde el 6 de noviembre.
Los futuros de soja de Estados Unidos cayeron a un mínimo de dos semanas el miércoles y los de aceite de soja bajaron alrededor de un 3% debido a las expectativas de abundantes cosechas de la oleaginosa en América del Sur este año junto con la incertidumbre sobre la demanda de combustible biodiésel, dijeron analistas.
Sin embargo, los futuros del trigo y del maíz subieron por el temor a una escalada de la guerra entre Ucrania y Rusia.
Los futuros de soja para enero en la Bolsa de Comercio de Chicago bajaron un 0,8%, a u$s363,95, después de caer al precio más bajo para el contrato desde el 6 de noviembre. El aceite de soja para diciembre perdió un 3,4%.
El trigo para marzo del CBOT subió un 0,7% a u$s203,01 y el maíz para diciembre avanzó un 0,7%, a u$s169,39 la tonelada.
Los futuros de soja con vencimiento al mes próximo volvieron a caer, mientras los operadores seguían de cerca el clima en Brasil, el mayor productor y exportador de soja del mundo. La siembra de la cosecha de soja 2024/25 está llegando a su fin y las lluvias beneficiosas han reforzado las perspectivas.
«No veo ninguna situación meteorológica amenazante en el horizonte en este momento», dijo Tom Fritz, socio de EFG Group en Chicago. Se espera que Brasil coseche un récord de 167,7 millones de toneladas de soja en la temporada 2024/25, dijo el martes la asociación de semillas oleaginosas Abiove.
Los futuros de aceite de soja del CBOT se vieron presionados por la preocupación por la demanda de biodiésel estadounidense y las baja del aceite de palma de Malasia.
Malasia aumentó su impuesto a las exportaciones de aceite de palma crudo de diciembre al 10%, señaló Fritz.
Mientras tanto, la escalada de la guerra en la región exportadora de granos del mar Negro ayudó a que los futuros del trigo y el maíz superaran una debilidad inicial. Ucrania disparó una andanada de misiles de crucero británicos Storm Shadow contra Rusia el miércoles, un día después de que lanzó otros estadounidenses.
La noticia reavivó la preocupación por el suministro del mar Negro, pero, como en acontecimientos bélicos anteriores, la reacción del mercado se vio atenuada por la ausencia de una interrupción inmediata del comercio de granos.
