El Gobierno de Ecuador anunció que se encuentra «vigilante ante la alerta de posible tsunami» en la región insular de Galápagos y ordenó una suspensión inmediata de todas las actividades marítimas, así como la evacuación preventiva de playas, muelles y zonas bajas.
Asimismo, afirmó que el riesgo de afectación para el litoral continental ecuatoriano es menor por el momento, pero se mantiene en estado de observación.