Por tercer día consecutivo, viajar en tren es una misión práctimente imposible para miles de usuarios del AMBA. A pesar de que se dictó la conciliación obligatoria, este viernes el servicio no se normalizó: los servicios circulan a baja velocidad, hay demoras y cancelaciones.
Los problemas se repiten desde las primeras horas de este viernes y se intensificaron en en pleno horario pico en las líneas Roca, Mitre, el Urquiza y el Belgrano Norte, que además esta reducido entre Retiro y Grand Bourg.
De este modo, otra vez hay servicios cancelados, andenes abarrotados de gente por la menor frecuencia de las formaciones y se viaja en malas condiciones y con grandes demoras.
Los inconvenientes para los pasajeros no son nuevos. Desde el miércoles, los maquinistas agrupados en el gremio La Fraternidad trabajan a reglamento, por lo que las formaciones circulan a un máximo de 30 kilómetros por hora.
Este jueves, hubo una reunión en la Secretaría de Trabajo en la que participaron las la empresa Trenes Argentinos y representantes de La Fraternidad. Según informó el organismo dependiente del Ministerio de Capital Humano, el encuentro finalizó cuando el «titular del sindicato de trenes La Fraternidad, Omar Maturano, decidió retirarse de la mesa y cortar la negociación».
A pesar de que no se llegó a un acuerdo, la cartera laboral firmó la conciliación obligatoria. Sin embargo, el servicio no se normalizó.
Desde el sindicato sostienen que no se trata de una medida de fuerza, sino que los trenes avanzan a esa velocidad por el «pésimo estado en que se encuentran los trenes y la infraestructura ferroviaria».