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Los consumidores españoles tendrán información veraz sobre el origen de los productos y podrán asegurarse de no contribuir al «genocidio en curso en Palestina», declaró el ministro de Consumo.
El ministro de Derechos Sociales y Consumo de España, Pablo Bustinduy, emitió una nota informativa dirigida a las empresas, operadores económicos y comerciales que importan al país productos israelíes para recordarles que deben reflejar de manera «clara» en el etiquetado la información sobre las mercancías que provengan de los territorios ilegalmente ocupados por Israel.
El objetivo es «garantizar el derecho» de todos los consumidores en España a acceder a «información veraz» sobre el origen de los productos y conforme a sus decisiones de compra y, «si así lo desean, asegurarse de que no están contribuyendo al mantenimiento de esta situación ilegal de la ocupación y del genocidio en curso en Palestina«, declaró Bustinduy.
Las empresas deberán reflejar en el etiquetado el origen de los productos de asentamientos ilegales israelíes. Las personas consumidoras tienen derecho a información veraz para que sus decisiones de compra no contribuyan a la vulneración del derecho internacional y de los DDHH. pic.twitter.com/uHdU4HUYEB
— Pablo Bustinduy (@pbustinduy) October 17, 2024
El ministerio indica que los productos de los territorios ocupados deben etiquetarse como provenientes de un «asentamiento israelí» y no como «productos de Israel», de acuerdo al dictamen de la Comisión Europea (CE) sobre este tipo de mercancías.
Según una nota interpretativa emitida por la CE sobre los territorios ocupados desde 1967, que recuerda que, según el derecho internacional, los Altos de Golán y Cisjordania, incluido Jerusalén Este, no pertenecen a Israel, los productos provenientes de estas zonas deben especificar este origen geográfico e incluir la expresión «asentamiento israelí».
Asimismo, los productos de Palestina que no provengan de asentamientos israelíes también deben llevar un etiquetado detallado sobre su origen con especificaciones como «producto de Cisjordania», «producto palestino» o «producto de Gaza».
El pasado mes de mayo, España reconoció oficialmente el Estado de Palestina y, según el ministro Bustinduy, el Gobierno español espera que la Unión Europea adopte un paso similar, así como también suspenda el acuerdo comercial con Israel por el incumplimiento de la cláusula sobre el respeto a los derechos humanos en Oriente Medio.
