
La economía de la zona euro volvió a avanzar en abril, aunque lo hizo a un ritmo más lento que en las mediciones previas en el marco de la guerra comercial impulsada por Donald Trump. Ocurre que la demanda se debilitó y el sector de los servicios casi se estancó, lo que sugiere que la recuperación de la región es frágil, según reflejó una encuesta.
El índice PMI compuesto de producción de la zona euro HCOB, elaborado por S&P Global, cayó a 50,4 desde los 50,9 de marzo. La lectura se situaba justo por encima de la marca de 50 que separa el crecimiento de la contracción.
«El crecimiento económico de la zona euro se desaceleró en el primer mes del segundo trimestre, tras haber registrado un repunte en los tres primeros meses del año. El sector servicios, un sector clave, prácticamente se estancó en abril», dijo Cyrus de la Rubia, economista jefe del Hamburg Commercial Bank. El PMI de servicios descendió a 50,1 desde 51,0 en marzo, su lectura más baja en cinco meses y apenas por encima del umbral neutral.
Mientras tanto, el optimismo entre las empresas de servicios se debilitó y el índice de expectativas empresariales cayó a 55,1 desde 57,8, un mínimo no visto desde finales de 2022.
La demanda global se redujo por undécimo mes consecutivo y a un ritmo ligeramente superior al de marzo, ya que tanto los fabricantes como los proveedores de servicios registraron unas ventas más débiles. El índice de nuevas empresas disminuyó de 49,5 a 49,1 puntos. Los pedidos de exportación también bajaron, aunque al ritmo más lento en casi tres años.
Las empresas tuvieron que recurrir a los pedidos pendientes para mantener los niveles de actividad y los pedidos pendientes disminuyeron por vigésimo quinto mes consecutivo.
A pesar del débil crecimiento, el empleo aumentó por segundo mes consecutivo en el conjunto del bloque, aunque el incremento fue marginal y se limitó al sector servicios. Las empresas manufactureras recortaron puestos de trabajo por vigésimo tercer mes consecutivo.
País por país, ¿qué pasó con la actividad económica en Europa?
La encuesta mostró variaciones considerables en la zona euro. Irlanda lideró el crecimiento con un PMI de 54,0, aunque marcó un mínimo de dos meses. España le siguió con un 52,5, mientras que Italia registró un 52,1, el nivel más alto en 11 meses.
Alemania, la mayor economía europea, apenas creció con una lectura de 50,1, mientras Francia se mantuvo en contracción con 47,8.
En el frente de la inflación, los datos de abril revelaron una mayor moderación tanto en la inflación de los costes de insumos como en la de los precios de venta, con las presiones sobre los costes de insumos alcanzando su nivel más bajo en cinco meses.
«La inflación de los precios de venta ha disminuido y siguió su tendencia a la baja. Muchos miembros del Banco Central Europeo (BCE) han insinuado un nuevo recorte de los tipos de interés en junio, y estas últimas cifras parecen respaldar su postura», dijo De la Rubia.